Las condiciones de almacenamiento están reguladas por el Reglamente de Almacenamiento de Productos Químicos (APQ), en función de los productos almacenados y de sus cantidades nos afectaran unos u otras disposiciones.
Independientemente del cumplimiento de la APQ, la zona de almacenamiento de residuos debe de:
– Ser una zona claramente identificada para ello, de manera que se evite la mezcla de residuos peligrosos.
– Disponer de cubiertas que no permitan la mezcla con agua de lluvia, que podría provocar el aumento del volumen de producto contaminante. O bien, que los recipientes destinados a los residuos dispongan de tapa/cierre.
– Poseer una zona de retención en el firme, para prevenir las fugas y derrames en el lugar donde se ubican los residuos peligrosos.
– El piso en esta zona debe ser lo menos permeable posible y no deben existir en las cercanías, posibles puntos de recogida que canalizaran el vertido a la red de aguas.
– Evitar las pendientes de terreno que facilitan el desplazamiento del fluido una vez en el suelo.
Tener en cuenta la tabla de incompatibilidades.